El niño protagonista de este libro tiene una mascota muy especial. ¿Parece un dinosaurio? Pues NO lo es. Podría ser un manifestasaurio, un trallazosaurio, un saltimbanquisaurio, un dormilonsaurio… Puede ser cualquier cosa que desees salvo un simple dinosaurio. Este álbum ilustrado está plagado de ingeniosos juegos de palabras para que los pequeños y pequeñas aprendan a nombrar a este pequeño diNOsaurio tan especial.
A Barry Timms, su autor, le gusta especialmente la estructura de los álbumes y encontrar soluciones para contar historias apasionantes en pocas páginas. El libro está compuesto por textos sencillos, de corte fantástico, con pequeñas rimas y grandes dosis de humor. Además, incluye ilustraciones con gran carga expresiva que ayudan a imaginar las invenciones del dinosaurio.
Un libro que fomenta la creatividad en los pequeños lectores. Tanto, que el juego de palabras puede trascender el libro y convertirse en un juego lingüístico entre los adultos y los pequeños lectores. ¡Verás qué divertido!