Libros infantiles de autoestima

Es primavera en el bosque, y Leo sale de casa en busca de Filipo para proponerle que pasen juntos el día y vayan de pícnic. Tras asegurarle que será un bonito y tranquilo día, Filipo accede. Sin embargo, la jornada no será tan apacible como planeaban.

Ser paciente y saber esperar el momento adecuado es un comportamiento que los niños deben aprender para resolver conflictos de su vida cotidiana.

Compartir los juguetes, la atención de papá o mamá, la comida preferida… es una habilidad emocional imprescindible que los niños deben poner en práctica en sus relaciones sociales.

Todas las noches sucede lo mismo cuando llega la hora de que los niños se vayan a dormir, pero también hay diferencias: unos no han terminado de jugar, otros tienen frío o hambre, y alguno tiene la cama ocupada por sus peluches.

Por mucho que su familia se lo pida una y otra vez, Harriet no quiere peinarse. Pero no paran de insistir imaginando escenas de lo más fantasiosas. Quizá tenga que adoptar una solución drástica.

Un perro se ha tragado una pelota, un caballo se ha hecho daño en una pata y un periquito no quiere comer. Los tendrá que ver el doctor especialista en animales: el veterinario.

The expressions of a language often come from funny anecdotes. This illustrated book contains 136 sayings and phrases in British English grouped into 19 themes.

Debajo de la tierra y en el fondo del mar hay miles de historias. Los arqueólogos trabajan para desenterrarlas y ayudarnos a entender el pasado.

Cinco… Cuatro… Tres… Dos… Uno… El astronauta despega y explora el espacio en su nave. Viaja por el espacio y hace todo tipo de pruebas que envía a la Tierra. Esta profesión es el sueño de millones de niños y niñas.

Se abre el telón y empieza el ballet. Las bailarinas llenan el escenario con sus movimientos mágicos. Danzan sin parar y cuentan historias con los movimientos de sus cuerpos. Una profesión para niños y niñas que disfrutan de la música.

Allí donde nacen todos los caminos había un pueblo. El pequeño Pollo creció deprisa y pronto se hizo un Gallo tenor. Pero el tiempo pasó y el Gallo comenzó a lamentarse. Entonar siempre la misma canción resultaba aburrido, así que decidió cantar para oídos más exquisitos.